Habitación espectacular y hotel acogedor. Merece la pena.
El hotel es una maravilla, teníamos vistas al arco desde nuestra inmensa habitación. En realidad son como apartamentos de unos 80-90 metros cuadrados.
Para mi esto no es ningún inconveniente pero a nivel informativo, al ser temporada baja, no daban cenas y teníamos que ir a Cabo San Lucas o al super para hacernos las cenas en el propio apartamento. También te ceden las barbacoas comunitarias para poder usarlas cuando quieras.
El único problema de esto es que no puedo valorar la comida…
La piscina es pequeñita pero de las que no se distinguen del horizonte.
No había mucha gente (ninguna con nuestro horario español) y eso hizo que fuera una maravilla estar en el hotel porque siempre había sitio en la piscina, spa, gym.
Bueno, y una playita preciosa que prácticamente es privada porque sólo se accede desde el hotel y desde unos pocos apartamentos al otro lado.
El nivel de servicio es muy alto desde que llegas. Todo el personal fue muy educado y amable aunque recuerdo especialmente a Domingo. También hay que tener en cuenta que en estos apartamentos la limpieza de las habitaciones se contrata por separado, asi que tendréis que haceros las camitas y fregar como en vuestra propia casa, si no queréis contratarlo.
También tienen conexión wifi gratuita y aparcacoches.
Alquilar un coche en el aeropuerto es básico para este viaje porque por esta zona os tendréis que mover en coche para todo (super, snorkel, visitar el pueblo, etc)
Si queréis marcha, tenéis el pueblo a unos 5 minutos (EN COCHE) y os aseguro que la encontrareis. También os ofrecerán con insistencia el mismo plato con pescado, algo de carne y algo de marisco en todos los restaurantes del puerto a muy buen precio y con un nivel de atención muy alto.
Me encantó y creo que será bastante difícil encontrar una habitación/apartamento de este nivel.