El hotel es definitivamente feo. La pintura de los pasillos, las puertas y el cuarto 306 estan en malas condiciones.
La ducha de la habitación 206 no tenia mampara, o sea, baño todo mojado.
El ascensor, a veces anduvo y otras no.
El desayuno no es malo, pero por el costo conviene tomarlo afuera. Al mismo precio, hay lugares mucho mas lindos que el desayunador del hotel.
El personal es un encanto excepto el administrador, que atiende por la mañana y parece hacerte un favor.
Pero..., el hotel es limpio y está ubicado en el corazón de Montmartre. La zona es muy buena y la entrada al metro está a 50 metros. La basílica Sacre Coeur está a 4 cuadras.
Si pudiese volveria al vecindario, pero a otro hotel. Si no pudiese elegir, repetiria.Más
- Wi-Fi gratis
- Piscina
- Visitar el sitio web del hotel