Muy cerca del centro. El desayuno excelente. Es una tontería, pero después de una semana sin televisión, agradecimos que tuvieran un canal en español.
Cuando llegamos a la hora de hacer el check in, nuestra habitación no estaba lista, y tuvimos que esperar casi una hora porque la estaban "limpiando", pongo entre comillas, porque la verdad que la limpieza dejaba mucho que desear. Las camas eran muy incómodas, eramos cinco, la cama de matrimonio estaba hundida, y los sofás-camas supletorios eran durísimos, dormías casi como en el suelo.