Nuestra familia lo pasó de maravilla en el Bonaire. El hotel es en su conjunto precioso. Aquí están mis puntos positivos: excelentes animadores para niños, gracias a la señorita Lotty y al chiflado Nathan (espero que te encuentres mejor) y a Krazy Kayla. Les encantaron a mis hijos y realmente me impresionaron al memorizar también los nombres de los adultos. Los seguían como ovejitas por todas partes y en cambio ellos les llamaban la tercera familia, lo cual a ellos ¡simplemente les encantaba! Un personal estupendo en el bar, a mi chico y a mi marido les encantaba Daniel. Un personal amable y eficiente en recepción, aparte de una mujer española que estuvo al borde de la mala educación, no lo noté yo únicamente y realmente decepcionó al lugar completo. Un personal encantador en el restaurante, en particular el chino español delgado (lo siento, tenía intención de comprobar su placa) tan amable y agradable especialmente con mi bebé. Gran piscina y aprecié que la piscina interior estuviera aún abierta, ya que el tiempo aún estaba un poco variable. Habría estado bien que hubieran movido el espectáculo allí en un día que estaba nublado en vez de cancelar las actividades, tales como el bingo acuático, pero aún así, montaron en cambio un Jenga gigante. Variedad de alimentos, (las salchichas y los postres un poco duros en mi opinión) carne, ensalada y el marisco fabuloso. ¡Los niños y mi marido se comieron...Nuestra familia lo pasó de maravilla en el Bonaire. El hotel es en su conjunto precioso. Aquí están mis puntos positivos: excelentes animadores para niños, gracias a la señorita Lotty y al chiflado Nathan (espero que te encuentres mejor) y a Krazy Kayla. Les encantaron a mis hijos y realmente me impresionaron al memorizar también los nombres de los adultos. Los seguían como ovejitas por todas partes y en cambio ellos les llamaban la tercera familia, lo cual a ellos ¡simplemente les encantaba! Un personal estupendo en el bar, a mi chico y a mi marido les encantaba Daniel. Un personal amable y eficiente en recepción, aparte de una mujer española que estuvo al borde de la mala educación, no lo noté yo únicamente y realmente decepcionó al lugar completo. Un personal encantador en el restaurante, en particular el chino español delgado (lo siento, tenía intención de comprobar su placa) tan amable y agradable especialmente con mi bebé. Gran piscina y aprecié que la piscina interior estuviera aún abierta, ya que el tiempo aún estaba un poco variable. Habría estado bien que hubieran movido el espectáculo allí en un día que estaba nublado en vez de cancelar las actividades, tales como el bingo acuático, pero aún así, montaron en cambio un Jenga gigante. Variedad de alimentos, (las salchichas y los postres un poco duros en mi opinión) carne, ensalada y el marisco fabuloso. ¡Los niños y mi marido se comieron su peso en helado! Sí, mi marido era él que tenía un plato en la cena ¡¡con pasteles!! Cala Bona en sí misma me decepcionó un poco, pero como los niños no querían salir de la piscina no importaba. Conocí a algunos dueños de restaurantes encantadores. Julie's y L'olivias nuestros favoritos. En general, ¿volvería? ¡Por supuestísimo que sí! La única cosa es que volvería en temporada alta, así el de 9 años conocería a más niños de su edad y probablemente cogería media pensión, ya que Cala Bona para mí es apto únicamente para dar un paseo a la hora de la comida. ¡Reservad! ¡Si no queréis arrepentimientos!Más
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