Muy bonita experiencia, recomiendo ir al atardecer. De los mejores atardeceres vistos, a pesar que en unas zonas está. Nublado. La explicación por parte de la señora nos enseñó que el santuario también es una forma de vida y gracias a ellos sobreviven y evitan la caza.

Un aeropuerto pequeño y enmarcado entre los cerros que aún con su ubicación a 25 minutos de Santa María Huatulco, hace del arribo algo que llena los sentidos ... Con una capacidad bastante funcional, presta servicio a aerolíneas nacionales y extranjeras haciendo del movimiento de pasajeros una experiencia agradable.

Estuvo bien la experiencia, la atención del personal muy buena, el traslado desde el hotel y de regreso muy bien, sin embargo, el río estaba muy muy calmado, no hubo emocion ni adrenalina, como sugerencia, en al descripción podrían incluir la velocidad a la que se va a descender dependiendo de la temporada. La explicacion muy buena por parte del joven Israel, muchas gracias por el apoyo.

Si bien la actividad en sí misma es totalmente recomendable, nos sentimos realmente descontentos con la forma en que el operador manejó el servicio. En primer lugar, cuando nos pusimos en contacto con Huatulco Travel Experience que no necesitaríamos que nos recogieran ya que llegaríamos en nuestro propio automóvil, nos dieron un punto de encuentro complétamente inespecífico (en realidad, el enlace de Google Maps para todo el puerto) y nos dieron la instrucción de que, una vez allí, deberíamos buscar a alguien con el nombre de Ambrosio Pacheco. Deambulamos de un grupo de personas al siguiente hasta que nos enteramos que el Sr. Pacheco no estaba allí. Alguien totalmente desconocido para nosotros se ofreció como nuestro guía turístico. Dado que no habíamos tenido noticias del operador sobre este cambio, nos sentimos inseguros por lo que enviamos un mensaje de texto y telefoneamos al operador para informarles que Ambrosio no estaba allí y que alguien parecía hablar en su nombre queria llevarnos. Solo recibimos un texto lacónico que decía "listo" de la sin ninguna disculpa o explicación sobre esta confusión. Una vez que aclarado que este señor sí pertenecía a la agencia local, estábamos listos para empezar con nuestro tour. Cuando nos pidieron que subiéramos a bordo, recordé que parte del recorrido de se trataba de bucear con esnórquel, pero nadie nos había ofrecido el equipo de alquiler que se mencionaba en el voucher. Solo después de que lo solicité, nos informaron que el equipo estaba disponible para alquilar en el puerto. De lo contrario, hubiéramos salido del puerto sin ningún equipo. Tampoco nos ofrecieron en ningún momento la posibilidad de entrar en el parque de Huatalco aunque en la experiencia sí indica la posibilidad de hacerlo (pagando 7 pesos de entrada al parque). El recorrido continuó normalmente hasta que nos ofrecieron hacer una parada en la bahía de Magüey para poder almorzar si lo deseamos. Aceptamos la propuesta y, mientras llegábamos a la orilla, el chico nos decía qué tipo de platos podíamos pedir en el restaurante. Cuando bajamos del barco nos presentó a una camarera que nos condujo a un restaurante ¡Ay Caray !, sin darnos la oportunidad de ver otras opciones (el lugar está lleno de restaurantes). El caso es que cuando comenzamos a ordenar nos dimos cuenta de que los precios eran realmente altos (más altos que cualquier otro restaurante que hayamos visitado durante nuestro tiempo en México, incluso los más elegantes de la Ciudad de México). Finalmente, cuando pedimos la cuenta, un camarero nos dijo solo la cantidad a pagar (al cambio unos 150 euros para 3 personas, sin vino) Solo después de insistir en ver la nota por escrito nos dimos cuenta de que algunos de los platos se habían cobrado como otras opciones más caras, por ejemplo el ceviche mixto se había convertido en mariscada fría. A raíz de eso discutimos con el personal del restaurante, pero finalmente aceptamos pagar porque no queríamos estropear nuestras vacaciones llamando a la policía y echando a perder más un día que ya se había estropeado. Nos sentimos realmente perplejos cuando la camarera que nos había recibido en la playa insistía en regresar a la orilla del mar con nosotros . No podíamos entender por qué quería acompañarnos hasta que la vimos deslizando algunos billetes a nuestro guía, el mismo que nos había llevado a esa trampa para turistas. En un viaje de 15 días por México con muchos tour privados a los largo del mismo, la única vez que nos hemos sentido estafados ha sido en esta ocasión. Recomiendo mucho la experiencia pero jamás la haría con esta agencia.

Fue muy agradable me encantó nos divertimos toda la familia 😀😀😀😀😀😀😀 felicidades por tan buen trabajo

En el mirador puedes observar la hermosa vista y tomar una foto de recuerdo de tu visita, en Huatulco hay diferentes restaurantes, playas, tours en el día y su actividad nocturna es muy variada, excelente lugar para disfrutar de unas dias de descanso.

Una experiencia maravillosa vimos delfines y mantarayas al borde de la lancha el capitán Jesús excelente mis respetos 100%recomendable

El tour que contrate, las personas que nos dieron el recorrido, al dejar nuestras mochilas en la camioneta que nos llevó en lo que bajabamos por el río, tomaron dinero y mi tarjeta de débito de mi mochila, nos dimos cuenta hasta mas tarde, al llamar a la agencia no se quisieron hacer responsables y no nos respondieron ni solucionaron, no vuelvo a contratar.

Un lugar increíble para visitar pasarla increíble y relajarse, mi guia el señor Jacobo un guia muy recomendable sin duda, el junto con el lugar hacen la visita una experiencia que valdra la pena recordar

tiene una vista espectacular de toda la bahia y la marina que esta abajo,hay vendedores con muy buenos precios de llaveros

Contraté a la empresa Paraíso Huatulco para hacer esta excursión. El guía que nos llevó fue excelente, los lugares maravillosos y abundante comida oaxaqueña (de la que conviene no abusar, porque para los que no somos mexicanos puede resultar picante). Anduvimos tranquilos, con suficiente tiempo para bañarnos y nadar en las cascadas. Luego del almuerzo, como en todas las excursiones, nos ofrecieron sus productos naturales (yo no compré nada, porque viajé solo con equipaje de mano y no tenía espacio para cargas extras).

Es un lugar hermoso y muy tranquilo, las playas tranquilas, el agua del mar tibia, los paisajes bellos. Muy seguro para caminar o andar en bicicleta. Un lugar familiar y para taer niños. Muchos lugares por conocer.