Una de las peores experiencias de mi vida. Un trato TERRIBLE. Los meseros entran y salen a cada rato, la cuenta enorme, te piden consumo mínimo (¿qué pasa sí no tomas alcohol?) Y todo para poner tu celular y YouTube (que eso se puede hacer en un domicilio). Les recomiendo que vayan a otra plataforma de reviews y vean cómo responden los comentarios... así mismo te tratan.

El lugar puede parecer un poco "aterrador" desde el exterior, ya que tienes que entrar en un edificio que no se ve muy bien, y cuando subimos las escaleras porque el ascensor no funcionaba, llegas a un escritorio no tan bien mantenido con no hay información real o letrero en el tercer piso más o menos... pero este es un verdadero lugar de karaoke, estilo japonés (estuve allí) donde básicamente obtienes tu propia habitación (éramos 2 pero una habitación básica puede acomodar 6 fácilmente), tu enorme catálogo de canciones (español e inglés), 2 micros y la pantalla del televisor. 2 horas es el mínimo por 500 pesos más necesitas comprar una botella de licor que va desde 1200 a 1500 pesos que puedes traer después. ¡Una auténtica pasada para los amantes del karaoke!