Preciosa isla de un agua azul turquesa maravilloso. El agua no cubre, hay sombrillas de paja y una pequeña palapa donde hacen comida. No permiten ponerte bloqueador solar, ni fumar cualquier tipo de tabaco. De echo, a uno que venía en nuestra excursión, le vio el vigilante de la isla vapear, y lo recluyeron en el barco y sólo pudo salir a comer. No te puedes llevar nada de allí, ni colgar ropa en ninguna planta. Sólo permiten 200 personas por día. Aconsejable bañadores y camisetas de manga larga para no quemarse. El sol es puro fuego. Verás iguanas, mantas, ermitaños, aves en cantidad, y desde el mirador, unas vistas espectaculares.