Impresionante casa antigua en excelente estado. Nos hospedamos en una de las habitaciones del ático y quedamos impresionados de la belleza de las instalaciones; también descansamos a pierna suelta (excepto cuando se despertaba la bebé).
El restaurant también es muy recomendable; conocimos otros alrededor y hacia el final del viaje preferimos hacer la mayoría de las comidas en el restaurant. Que si vas en plan de relax absoluto... debes saber que hay servicio a la habitación.
Maravillosa la atención del personal. ¡Nos encantaría regresar!
Si hay algo por mejorar, sería contar con un mayor estacionamiento.
Tan pronto como se registre, eres bienvenido con una sonrisa amable, un vaso de agua con sabor tradicional. Las habitaciones son todas diferentes! Dedicada a los artistas mexicanos o en consonancia con los tiempos en que fue construida, Quinta Las Acacias ofrece no sólo una muestra de la cultura, pero la elegancia y belleza de la ciudad de Guanajuato. Todo en el menú es delicioso. Excelente comida en un acogedor comedor.
Lo recomiendo encarecidamente!
A pesar de tener la distinción Tesoros de México y estar catalogado como Hotel Boutique considero que le falta.
Un Hotel Boutique crea en inmuebles antiguos un concepto fusión entre lo antiguo y lo moderno y Quinta Las Acacias en decoración y otros detalles no está a la altura.
Efectivamente es una casa antigua de principios del siglo pasado con atmósfera o decoración afrancesada del Porfiriato al punto de parecer Museo.
Las pocas habitaciones de la casa principal van de acuerdo a esa época pero la mezcla de estilos en las suites ubicadas en el terreno contiguo, pasa de lo afrancesado a lo churrigueresco por no decir de mal gusto como la suite Manuel Leal. Las suites son habitaciones relativamente modernas con jacuzzi. Se accede a ellas por el segundo piso de la casa principal y tienen una terraza exterior con nopalera estilo Santa Fe. Al entrar a la suite Manuel Leal se tiene un choque visual. Es una habitación obscura, con papel tapiz de terrible gusto al punto de la claustrofobia.
Pese a cierta negativa logré el cambio a una habitación standard clásica de la casa principal con mejor luz natural ya que tiene ventanas al parque y pueden permanecer abiertas. Por la noche el ruido de los coches con música a todo volúmen fue más soportable que el impacto visual anterior.
Otros detalles que restan calidad al hotel son la poca luz en baño, la falta de conexiones eléctricas a la mano, la colocación hechiza del televisor con cables a la vista, el no reponer amenities de baño y la aparición de una franja azul tapando la señal televisiva con un mensaje que dice "pague de inmediato" y no concuerda con el costo de la habitación. Ante esto la recepcionista envió a un técnico a verificar como si fuera una falla cuando lo que se necesita es estar al corriente del pago de los servicios que se ofrecen y por lo que cobran tarifas tan altas.
Puntos a favor:
*El desayuno incluido es bueno y con servicio a la habitación.
*El hotel se encuentra ubicado frente a un parque lindo y tranquilo.
*Se puede estacionar el coche y bajar maletas frente al hotel. Cuenta con un estacionamiento pequeño a unos pasos.
En resumen es un hotel para quiénes gusten de la decoración saturada. Tengan en cuenta que una habitación standard clásica o ático no son aptas para luna de miel o escapadas románticas pues el piso es de madera y se escucha cualquier ruido. Quizá y solo para estar mas alejado reservar una suite con jacuzzi pero deben asegurarse de apagar la luz para no ver la decoración.
Excelente opción en el hermoso Guanajuato.
Había visitado el restaurante meses antes, pero para nuestro aniversario elegimos una escapada en la suite china poblana; realmente hermosa, una velada única, decoración esquicita, jacuzzy deiciosi ycafé riquísimo dolce gusto.
Lo que no me gustó fue que la alberca es pequeña.
Recomendadísimo y en el desayuno prueben pan de naranja.
Son de esos lugares en los que uno no quiere estar solo de paso.
Ubicado en la denominada zona antigua de Guanajuato, este hotel boutique es ideal para el descanso. Combina la elegancia, confort y funcionalidad de las suites (con jacuzzi) con la tranquilidad y belleza del entorno natural.
Las suites que están en el patio de los nopales son de artistas, por lo que todas tienen cuadros y pinturas de cada uno de ellos, y están decorados con diferentes estilos, donde predomina la temática mexicana, pero también la europea. Pero todas guardan el mismo celo por el buen gusto y el cuidado de los detalles.
El sector del baño es para destacar con espacios muy amplios y con gran comodidad, donde el jacuzzi (para dos personas) es una parte relevante.