La verdad siento que para lo que cobran por noche no equivale a la calidad del servicio que ofrecen. En mi habitación nunca tuve agua caliente, incluso después de reportar el problema, además de que la regadera tenía mínima presión y salía un mini chorro de agua. La plancha estaba vieja y manchó mi camisa al plancharla e iba a una boda, además de que ya no tiene teflón y no planchaba nada. Siempre tuve que pedir toallas para la alberca porque nunca había y se tardaban horas en llevarlas y la verdad no estaban en muy buen estado la mayoría y el internet no tiene suficiente alcance para andar por todo el hotel. Lo que sí es que la atención de Vicente, el chico que recibe las maletas fue increíble, es amable, educado, nos dio recomendaciones y siempre nos recibía con una sonrisa y nos reconocía, creo que es el lo más rescatable del hotel.…
Felicidades a todo el personal en especial a Vicente bellboy a Daniel capitan a Margarita camarista y a Emmanuel idependientemente de todos y cada una de las perdonas que se distinguen por su calidad en el servicio. Alimentos excelente e instalaciones limpias y adecuadas. Felicidades!
El hotel me gustó mucho, la verdad es que las habitaciones son muy grandes y están bien acondicionadas. Pero si le falta mantenimiento. Deben revisar todo y arreglarlo. La alberca la limpiaron en medio de los huéspedes y eso no me agradó! Y la gente del restaurante es muy amable pero no lo logran. Son muchos meseros y muchas gente pero se hacen bolas, se tardan un buen en servirte y en cobrarte y traer las cosas adicionales que pides. Deben organizar mejor el restaurante. Pero lo mejor es Vicente el botones! Es amable, divertido y servicial.
Totalmente recomendable este hotel, su ubicación es buena y el servicio impecable, quiero reconocer especialmente a Vicente quien fue muy amable en todo momento y apapacho mucho a mi perrito Russo, me encanta que el hotel sea Pet friendly, sin duda regresaría.
En general es una gran opción para desconectar y relajarse en Cuernavaca, cerca del centro en auto pero suficientemente lejos para que la zona sea tranquila. Excelente servicio de los bellboys, reconocmiento especial a Emmanuel, y del equipo de restaurante/alberca, también del resto del personal. Alimentos buenos aunque la relación calidad precio no es la mejor, pero nada mal para sacarte de apuro. Recomiendo el molcajete, sincronizadas de pastor, nachos con arrachera Habitaciones muy amplias y cómodas, terraza y sala incluidas, nuestra tv prácticamente nunca tuvo señal (vimos un cable desconectado el día que salimos y no sé si fue eso) pero fuera de esa detalle todo lo demás bien, muy limpio y funcional. Sin duda alguna volveré, lo único que me pareció muy mal es que no sé si exista un reglamento para los huespedes o no, pero un grupo llegó a hospedarse en nuestro segundo día y no tenían buen comportamiento....llegaron a poner música con su bocina a un volumen alto, se metieron con la ropa que venían usando, prácticamente invadieron la alberca con su juego de pelota sin importar que había más usuarios.......incomodidad que no fue atajada por nadie del personal…
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