Me alojé en Casa Ambar un culpe de noches. La decoración es realmente agradable y el lugar tiene carácter. Está muy limpio y el personal es amable, especialmente Lis, que realmente nos ayudó a encontrar un transporte temprano a Playa del Carmen para nuestro viaje de buceo a Cozumel. Lo que realmente nos molestó es lo ruidoso que era durante la noche con los otros invitados en el área común hablando hasta altas horas de la noche, el sonido realmente eclipsó, por lo que nos despertaron varias veces por la noche al hablar con los invitados, incluso tuvimos que espantarlos. Cualquiera que suba las escaleras de madera hace ruidos fuertes. Así que nos costó dormir, pero de lo contrario el hotel está bien.
Casa mbar superó nuestras expectativas! El lugar es una hermosa y acogedora casa del árbol en la zona más fresca de la ciudad. Llegamos muy tarde el miércoles por la noche y nos llevaron a nuestra habitación y nos dieron el recorrido por las zonas comunes que compartiríamos con los demás. Había 2 cocinas (interior y exterior) y una sala de estar gigante con una mesa de comedor. Arriba, había un hermoso patio con hamacas y libros por todas partes (en caso de que olvides traer los tuyos). Nos despertábamos cada mañana con las caras muy amables del personal del hotel mientras preparaban el desayuno para nosotros. ¡Desayunamos con otras personas que se quedaron aquí e hicieron algunos grandes amigos de todo el mundo! Dejaríamos la mayor parte del día y regresaríamos por la noche y también pasaríamos el rato con nuestros nuevos amigos. Hay muchas opciones para comer aquí, así que simplemente camine afuera y mire a su alrededor. Un montón de bares divertidos. En general, nuestra habitación era hermosa y tenía un patio encantador. Nuestra cama era cómoda, pero recuerda mantener las puertas de tu patio cerradas para evitar que entren mosquitos en tu habitación; )…
Nos alojamos en Casa Ambar por 4 noches en nuestro viaje alrededor del mundo. El hotel está situado en el corazón de la moderna calle costera de Tulum, a solo un minuto a pie de la playa de arena blanca. Nos alojamos en una habitación con una terraza que daba directamente a la jungla. Este lugar se convirtió en nuestro favorito, sentarse allí y disfrutar de la naturaleza directamente en frente de nosotros. ¡Hermosa! El hotel Casa Ambar está construido en armonía con la naturaleza de los alrededores, incluso enormes palmeras crecen en el vestíbulo. Parece que la conciencia ecológica es una de las prioridades de la administración hotelera. Los interiores son increíbles: hermosos muebles de "estilo antiguo", lámparas de araña casi reales. Cada habitación es única, cada una tiene su propio estilo y decoración. Cada mañana el equipo sirve un desayuno delicioso y saludable, y para los huéspedes que prefieren cocinar sus propias comidas durante el día (como yo), hay una cocina con todo lo que uno necesita y una enorme mesa de comedor de madera (con frutas para los huéspedes allí!) en el área común. Casa Ambar proporciona agua potable ilimitada, que es muy útil en México (el agua del grifo en México no es apta para beber, en algunos lugares incluso el agua hervida no es lo suficientemente buena para beber). Hay bicicletas (el transporte más popular y conveniente alrededor de Tulum), y la bonificación más singular para los huéspedes son las excursiones gratuitas a una cueva privada y a la laguna. ¡Exclusivamente solo para huéspedes del hotel! El personal del hotel es muy atento y servicial. Durante nuestra estadía en Casa Ambar tuve una infección en el ojo y el personal del hotel me ayudó mucho; ¡incluso prepararon compresas de plantas especiales para mí! ¡Se lo agradezco mucho!…
Me escapaban a Casa Ambar una noche recientemente y fue inolvidable. Yo vivo en Playa del Carmen, y he pasado mucho tiempo en Tulum - me he alojado en varios hoteles en la zona y tengo que decir que Casa Ambar es ahora mi favorito. Yo era un gran fan de la Posada La Marzo, que es el otro hotel de los mismos propietarios, que es la razón por la que elegí Casa Ambar para alojarse. Nos dieron una cálida bienvenida y nos mostraron todo el espacioso interior del hotel, que una vez sirvió como casa de los dueños. Como tal, tiene un ambiente realmente único y acogedor, nada como un hotel pretencioso. Era muy cálido y acogedor, decorado con una gama de muebles antiguos y objetos eclécticos, así como artesanía local. Sucedió que un día lluvioso cuando llegamos, así que pasamos la mayoría de nuestro tiempo en la espaciosa y elegante habitación amueblada, y en la terraza con vistas a la selva. Fue una noche muy especial, estábamos buscando un descanso necesario y eso es exactamente lo que conseguimos. El cuarto de baño era espacioso y elegantemente escaso (que me encantó) y la ducha estaba bien caliente. La enorme cama de matrimonio tamaño king era muy cómoda y hay incluso batas en la habitación que ha perdido casi convertido en un arte. . . Nos fuimos temprano para trabajar, así que no tuve la oportunidad de experimentar el desayuno, pero el personal era lo suficientemente amable para ofrecer café recién hecho que apreciamos mucho. No cabe duda de que volveremos a visitar el cenote privado que suena absolutamente increíble! ! ! Esta fue una visita rápida pero nos proporcionó más de paz y rejuvenecimiento de lo esperado. Gracias a la chapa de la genuina hospitalidad (raro en Tulum) y a los propietarios para crear una gran relación calidad-precio, refugio único y hermoso de la selva. Gracias, Casa Ambar!…
Fui a Tulum el mes pasado por primera vez y nos alojamos en Casa Ambar durante una semana con un amigo. La ubicación era perfecta, justo al otro lado de la carretera de la playa con un montón de cafeterías y restaurantes cerca. El hotel está muy bien decorado, con piezas de época y tejidos de colores, lo que le da un ambiente bohemio. Pensé Casa Ambar era de un tamaño perfecto, no tener un gran tipo resort sentir como muchos de los otros hoteles, tuvimos la oportunidad de conocer el personal que hizo para una experiencia más auténtica. Olga y chapa fueron tan increíble y amable las personas, e incluso terminó llevándonos a la laguna privada del hotel, cuevas y cenote (ninguno de los cuales están abiertos al público) que eran todas magníficas. Con lo que me ofrecen, no creo que puedas encontrar una mejor relación calidad-precio en Tulum! Tuvimos una gran experiencia y sin duda recomendaría Casa Ambar a cualquiera que vaya a Tulum!…
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