El cuarto con vista al mar es extraordinario. Es un Hotel chico con pocas habitaciones si buscas un hotel intimo. El servicio de los meseros es muy buenisimo, muy atentos. Abraham el recepcionista es el mas CHINGON!!!!! De lo mas lindo y atento, nos consiguio un carro para rentar, nos hizo reservaciones para Temazcal y nos dio muchas recomendaciones de actividades en el Pueblo. En General el Hotel esta estupendo, te dan desayuno Gratis y todos los trabajadores son muy amables. El Hotel Tiene una vibra bohemia, romatica, lejos del bullicio. Normalmente nos hospedamos en Hotel Grand Balam Plaza y Mereva lleno mis espectativas. Si quieres ver el agua cristalina color turquesa tienes que venir en temporada de diciembre a abril por que en el verano hay mucho sargazo y el agua esta muy lodosa y no puedes distribur de la playa. En Mereva siempre estan limpiando la arena.…
La descripción del anfitrion es falsa. Dice un dormitorio pero es un monoambiente dividido por un Placard y no hay puerta. Agradable para pareja y un tercer ocupante ya es problemático. Además el anfitrion no entrega la llave ni recepciona la propiedad al realizar el ckeck out lo cual da por a futuros reclamos . Hay alojamientos mejored
Mereva es un lugar lleno de magia, con una atención excelente, habitaciones hermosas y muy aseadas con vista al mar, la comida es deliciosa y el desayuno incluido es increíble. Si lo que quieres es escapar solo o en pareja es el lugar indicado. Francisco, Miguel, José Luis, Moises, Francelia, Omar, Delia, Reina y Teo gracias por hacer de estos días una experiencia inolvidable que con seguridad repetiré. Paula 🇨🇴
Hotel muy limpio y aseado Personal muy amable y atento con los huéspedes Las fotos publicadas son tal cual, es el reflejo de lo que es el hotel Excelente variedad para el desayuno. No así para la cena, pero tienes 2 hoteles - restaurantes a los costados para variar Poca variedad de tragos para el chileno, mucho coctel pero no hay mucho tragos fuertes Muy tranquilo, no hay bulla en la noche Quizás falta un poco más de onda para las tardes y noches. La playa es una taza de leche. Lo mejor el cuidador don Emilio!
El hotel muy tranquilo, lindo, estilo boho, pocas habitaciones, nos quedamos en segundo piso con vista al mar y es bello el amanecer. Restaurante deliciosa comida, el desayuno esta incluido y es super completo. Personal muy atento. El servicio de masajes super recomendado. Lo único es el camino para ingresar al hotel muy mal, rentamos auto porque esta retirado de la zona hotelera, pero cada salida y entrada teníamos que hacerlo con tiempo pues los agujeros que casi cubren toda la carretera llenos de agua hace que sea mas tardado el trayecto. Es buena opción la renta de auto para moverse a lugares de interés. Está muy cerca de las ruinas y mistika museo que no debe dejar de visitarse.
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