Detrás de una clásica fachada colonial poblana se esconde un suntuoso lobby con un espectacular ambiente iluminado que despliega una gran escalera y muros enormes en donde se combinan a la perfección la arquitectura tradicional de la casona con elementos únicos y modernos.
Las 10 magníficas y únicas suites ofrecen un servicio de descanso ideal para un fin de semana de relajación en pareja, un viaje de negocios o para un viaje de placer a la capital poblana. De estilo Colonial Ecléctico, se caracterizan por la mezcla de elementos del neoclásico europeo con un toque mexicano tradicional complementado con las comodidades de la tecnología moderna, irradiando sofisticación e individualidad.
Me encantó el hotel, la ubicación es muy buena, las habitaciones amplias, pero lo que más me gustó fue la atención de los agentes de la recepción, dan un servicio maravilloso, sobretodo Mauricio Santamaría y Antonio Rodríguez quienes me aconsejaban sobre los lugares a dónde ir y me cuidaban al tomar el Uber.
El hotel es muy confortable y la decoración moderna y agradable. A un par de cuadras de la Catedral, la ubicación es muy buena. Las iluminación en las habitaciones es muy obscura y no tienen ventilación. El staff es muy amigable y servicial
Este hotel se encuentra muy cerca del zócalo de Puebla, se llega a él caminando. Las habitaciones son amplias y la que nos asignaron cuenta con una tina de hidromasaje. La estancia incluye sólo un café y pan tostado, el cual estamos apunto de calificar. Nos encanta el estilo de decoración! Definitivamente regresaremos!
Se ve que le echaron ganas a la decoración e interiorismo. El hotel es reciente y creo que a eso se debe su falta total de profesionalismo. No es caro, pero eso no significa que tengas que aguantar los errores de capacitación de su personal. La habitación que pedimos tenía una tina inservible y al pedir que me solucionaran me ofrecieron cambiarme de habitación, lo cual me pareció lo más lógico, en cualquier parte del mundo lo hubieran solucionado igual. Aquí el detalle es que nos cambiaron a una habitación “mejor” que tenía una cama extra y antes de irse, el empleado del hotel (no sé si era el Gerente) me dijo y cito textual: “sólo le recuerdo que no puede tocar la cama extra” y se fue incluso un tanto molesto. Les confieso que mi primera reacción fue reírme a carcajadas. Sin embargo hoy al check out tuve que decirles que esa no es la forma de tratar a un huésped. Me he hospedado en hoteles de todo tipo, más caros y más baratos que este, y en ningún lugar la atención había siendo Tan pobre, con tanta falta de vocación y sobre todo de sentido común. Tal vez si me hubieran dicho que me iban a cobrar la Diferencia por el cambio de habitación hubiera sido mucho mejor, les pago y todos volvemos a ser amigos. Nunca se hospeden aquí mis amigos. Nota curiosa: la Tina de la segunda habitación tampoco sirve!! Jajajaja de película.…
Me cancelaron dos veces a la mera hora, prometen cosas que no cumplen, tuve que buscar dos veces hotel de emergencia para hospedarme. Pésimo servicio, jamas los recomendaría ni intentaria de nuevo hospedarme ahí. Karla Vanegas
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