Steigenberger Hotel Herrenhof
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Información
Steigenberger Hotel Herrenhof Wien es una magnífica elección para los viajeros que visiten Viena, ya que ofrece un ambiente para familias, además de numerosos servicios diseñados para mejorar tu estancia.
Durante su estancia en Steigenberger Herrenhof Wien, los huéspedes pueden visitar Peterskirche (0,3 km) y State Hall of the Austrian National Library (0,4 km), algunas de las principales atracciones de Viena.
Se ofrece wifi a los huéspedes y las habitaciones de Steigenberger Herrenhof Wien incluyen televisor de pantalla plana.
Durante la estancia, disfruta de algunos de los servicios que ofrecen, como recepción abierta 24 horas, servicio de habitaciones y conserje. Los huéspedes de Steigenberger Herrenhof Wien también disponen de sauna y desayuno allí mismo. Para viajeros con coche hay aparcamiento disponible.
En Viena hay un gran número de restaurantes de comida mediterránea. Así que cuando estés aquí, no te pierdas sitios como Fabios, Trattoria Toscana La No y Via Toledo Enopizzeria, que sirven fantásticos platos.
Lo mejor de todo es que Steigenberger Herrenhof Wien es una fantástica base desde la que conocer numerosas atracciones de Viena, como Österreichisches Parlament, United Nations in Vienna y Burgerliches Zeughaus, que son edificios gubernamentales populares.
¡Disfruta de tu estancia en Viena!
Ubicación
Opiniones
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Me parece una vergüenza que cambien los servicios ligados a una tarifa (prepagada!) y se limiten a regalarnos una botella de agua a modo de compensación.
Imagínense que hubiera reservado y pagado una tarifa de alojamiento y desayuno, y que cuando llego al hotel me dicen que ya no dan desayunos, pero que me lo compensan con un café de la cafetería. Todo esto al mismo tiempo que te ponen fotos del buffet cada vez que enciendes la TV de la habitación. Una tomadura de pelo.
El último día teníamos que salir pronto y fue el único que decidimos desayunar en el hotel. Al preguntar en recepción el precio del desayuno me dicen que son 36€ para los adultos y 18€ para mi hija de 12 años. Al día siguiente, al ir a pagar los desayunos, me pasan un ticket de 108€. Me tocó volver a discutir con que no era eso lo que me habían dicho y tuvimos que estar discutiendo hasta al final aceptaron aplicar la tarifa prometida. Todo esto con prisa para ir al aeropuerto.
También ahorran mucho en limpieza porque no cambiaron las sabanas ni uno de los 5 días que estuvimos alojados. Eso no lo ves ni en un 3 estrellas en España
En resumen una experiencia muy desagradable por el trato y el permanente intento de hacerte pagar más de la cuenta por todo.
Citaré a modo de ejemplo tres cosas concretas que no nos han gustado.
Primera. Es increíble que, si no te acuerdas cada día de poner en la puerta el cartelito de “Por favor, hagan la habitación”, sencillamente no te la arreglan y te quedas con tu habitación deshecha y sin limpiar hasta el dia siguiente: ¿es eso propio de un hotel de 5 estrellas?
Segunda. A la llegada te piden la tarjeta de crédito y te retienen no solo el importe de lo que habrás de pagar, sino una suma bastante mayor “por si realizas gastos en el hotel”: ¿irían ustedes a un restaurante en el que, al llegar, el camarero les dijera “Para empezar deme usted cien euros y luego cuando se vaya ya haremos cuentas”?
Y la tercera (que lamentablemente no es exclusiva de este hotel) es la maldita manía, cada vez más extendida, de hacer de vidrio la puerta y las paredes del baño, con lo cual lo que se consigue es que en cada inevitable visita nocturna al baño despiertes a tu pareja.
También podría mejorar un poco la amabilidad del personal de recepción: sería injusto decir que son maleducados, pero tampoco hacen grandes esfuerzos por ser agradables.
Dicho lo malo, dos cosas buenas: la ubicación, que es inmejorable, y la tranquilidad y el silencio.
Nuestro balance global es de decepción con respecto a las expectativas que nos habíamos formado: la próxima vez que vayamos a Viena buscaremos un buen hotel de 4 estrellas, que nos costará mucho menos y en el que seguramente estaremos mucho mejor atendidos.
El hotel es bastante bueno. Más menos 4,5 estrellas en su referente aquí en España. La calidad del sueño es bastante buena y las instalaciones más que correctas.
El metro solo lo utilizamos el último dia, más que nada por verlo. No era necesario.
Sin duda Viena es una ciudad preciosa, aunque carilla...
Lo que más me sorprendió y siempre recordaré fué la atención de una recepcionista. La señorita Rita se presentó amablemente en español. En un país donde todo el mundo habla inglés y alemán.
Nos reservó el táxi para la salida, resolvió numerosas dudas y siempre con una sonrisa.
Gracias por habernos hecho nuestro viaje más fácil.
Alvaro.
Muy cerca de la Catedral , de museos de palacios t de Cafeterías Famosas
Limpieza muy bien
Baños y habitaciones estupendas
Muy bien en general
"Recomiendo las habitaciones que dan al exterior. Aunque den a la calle no se oyen ruidos. Las otras dan a un patio interior."Leer la opinión completa
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