Lugar de hermosos paisajes, cómodas y acogedoras cabañitas rústicas. Excelente trato y servicio de todo el personal. La comida es deliciosa y el restaurante súper agradable. No se pierdan una cena de pizzas y vinito. Ideal para ir en familia o pareja. A 10 min., en auto, del centro de Zacatlán.
Un hotel de lo mejor. Bellísimos paisajes. Áreas verdes enormes. Muy bonitas y cómodas cabañas. La comida , toda, deliciosa. Pero lo mejor es la atención. Todo mundo te atiende de primera. Vale la pena ir a Zacatlán y hospedarse ahí. Acabo de ir, y la verdad, no veo la hora de regresar. Felicidades por el concepto y el trato que se le da al huésped...
Divina arquitectura rústica sin perder comodidad y buen gusto. Todo muy bien pensando para hacerte sentir relajado. Excelente atención, comida deliciosa, los niños disfrutaron muchísimo el contacto con la naturaleza y amaron a los perritos que ahí viven, que son súper cool! Regresaría sin pensarlo.
Un lugar encantado, muy procurado donde reina paz y naturaleza. Habitaciones y cabañas excelentes...no pides más en ellas. La cocina destaca, puff, materia prima y elaboración se llevan las palmas. Muy buena atención de todos todos. Rico para descansar, meditar, cuenta con temazcal, zona de fogata...todo te envuelve en magia, sala para practicas de yoga completa. Recomendable sin duda, en pareja o en familia. Me encanto y conservo su magia para el regreso.
Fuimos por una pariente que lo recomendó. Hermoso ambiente con aspectos "rústicos" y una calidad excelente. No se extraña la ausencia de tele. Hay juegos que prestan para pasar el tiempo, etc. Fabuloso desayuno buffet con tlacoyos, granola casero con yogur y fruta, guisados, café de olla, etc. Solo tuvimos algunos problemas con el wifi y con unos "artículos básicos" que se necesitaban de emergencia y que no tenían a la mano.
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