Hemos estado mi mujer y yo en este hotel y ha sido una experiencia espectacular. Las cabañas tienen mucho encanto (no hay ventanas sino que son mosquiteras para escuchar la fauna del lugar) y la comida está muy bien a buen precio. Las excursiones salen algo más caras (aunque no mucho) respecto a la zona de la Pavona (donde se coge la barca para ir al hotel) . Pero por no desplazarte merece la pena. Y si tenéis la suerte de que os toque Adrián de guía os ayudará mucho. Un crack. Sin duda una muy buena opción y un lugar de cuento.
Una experiencia genial ☺️ que duermes en cabañas en plena jungla del que solo te separa mosquiteros…increíble experiencia dormir con el sonido de animales como Monos 🙉 aulladores, ranas…. El personal súper amable!!desde recepción hasta los camareros y los limpiadores te facilitan todo en todo momento
Hemos pasado 3 noches en este hotel en plena selva. Se trata de una serie de casitas individuales. A destacar que las ventanas no tienen cristales ni ningún tipo de cortina que pare la luz, por lo que estas en pleno contacto con los sonidos y temperatura exterior. Nuestra casita inicialmente tenía dos camas pero nos cambiaron a otra con una sola cama ya que en la primera no funcionaba el agua caliente del baño. La habitación en si y el baño es bastante austero, lo justo para descansar y darte una ducha. El baño sí que necesitaría una actualización. Hemos desayuna comido y cenado casi los 3 días y aunque está bien, es bastante repetitivo. Sorprende que aunque es tipo buffet no lo puedes coger tu. También es sorprendente que compartes la mesa pequeña con otras personas. La zona de la piscina correcta que que solo había 4 tumbonas, el resto sillas. Contratamos un paseo en canoa que fue bastante agradable, en especial la atención del guía Antonio. Esta a 5 minutos en taxi por el canal a Tortuguero. En general el sitio es correcto, aunque tal vez estaría bien que mejorasen los baños y algo más de variedad en las comidas.…
Hemos pasado unos días en este hotel y nos ha encantado.Todo está integrado en la selva y la experiencia es estupenda.Los servicios (comida,limpieza,etc) está muy bien a excepción de los bares nocturnos,que inexplicablemente tienen un servicio penoso.
Un hotel de 10, impresionante al llegar en medio de la naturaleza, las habitaciones son mini casas, no hay cristaleras en las ventanas solo mosquiteras...de primeras os resultará raro pero después es apasionante. El bufet escaso y repetitivo pero para un par de días tiene pase. Buena piscina y wifi en todo el complejo, incluido en las habitaciones que en principio ponía que no había!!
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