Muchos bichos por todos sitios, el apartamento sucio, las toallas y sábanas igual. Los fuegos de la cocina apenas funcionan y las sartenes se pegan. Los seguratas te vigilan como si les debieses la vida o como si estuvieras encerrado en una cárcel. Se ponen a mirar mucho y resulta realmente incómodo, si estas de vacaciones no es agradable que te sientas vigilado las 24 horas del dia. Surrealista el hecho de estar siete personas en la terraza tranquilamente y que te amenacen con quitarte la fianza una y otra vez sin estar si quiera molestando. La piscina esta llena de pelos. El frigorifico no enfría. Las paredes y el techo llenos de humedades, el timbre no funciona, las cortinas sucias, los pestillos de los baños no funcionan. Vinimos con una agencia de viajes y la gestión fue pésima. Nos dejan fuera del apartamento dos horas a 40 grados. Apenas hay cobertura, parece una cueva y el wifi no funciona.…
Estuvimos está semana santa y la verdad es que estuvo muy bien , el miércoles empezaron a llegar cientos de chavales jóvenes que la primera impresión fue que no nos iban a dejar dormir por sus fiestas en las terrazas pero se portaron bastante bien y a partir de las 00:00 no se escuchaba demasiado ruido por lo que doy la máxima puntuación
Las instalaciones están bien. La terraza podía estar limpia pero se acepta que tras la calima y el mal tiempo toda esté con barro. Lo peor es que es un lugar de peregrinación de ordas de jóvenes con un único objetivo y no es el de disfrutar de la playa y el descanso. Ruido, alcohol, olor a hierba (debe ser la única verdura que ingieren), etc. Ojo que cada uno es libre de pasar sus vacaciones como quiera pero lo mínimo que esperas cuando desembolsas el importe del apartamento y 500 euros más de fianza es poder descansar tranquilo. No lo recomiendo para familias en ninguna época del año. Por lo que nos han contado, Mojácar Costa va en camino de quitar el título a Magaluz.
Haces la reserva por telefono y la Primera sorpresa al llegar, Alejadisimo de todo, en medio de la nada, rodeado de un residencial cutre. Segunda sorpresa nos la da Alberto, un recepcionista , por cierto el mismo que nos hace la reserva 2horas antes, falsa y errónea.CUIDADO!! .Nos hace reserva pero no informa que para poder entrar al hotel hay que pagar la reserva y además añadir 200€ a modo de fianza. En fin ...salimos huyendo de allí.
Es el tercer año que reservamos. Apartamentos con fantásticas vistas al mar, amplias terrazas muy limpios y amplios. Son justo lo que buscamos. Buen aparcamiento. Quien sea cocinillas puede echar cosas a faltar. En septiembre muy tranquilos.
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