Este mes de Agosto de 2021 hemos vuelto a el Hotel España de Lanjarón dos años después. El grato recuerdo que teníamos de una agradable estancia se ha esfumado en la semana que hemos estado. A pesar de haber reservado con antelación una habitación que no diera a la calle y que tuviera una pequeña terracita en la primera planta, nos la dieron en la segunda, pegada al ascensor con el consiguiente ruido y en la que la terraza hace de embudo y el aire brilla por su ausencia. Teniendo en cuenta que las habitaciones no cuentan con aire acondicionado, cosa que sabíamos, y coincidiendo con la ola de calor extremo, ha sido insufrible el dormir por la noche, y una temperatura agobiante que impedía el descanso. De la primera a la segunda planta, la diferencia de temperatura es claramente diferente y con ese calor tan extremo hemos pasado las de Caín. En cuanto a la piscina del Hotel, la mala organización, la anarquía y el como Pedro por su casa es algo habitual. Te la ocupan personas que no se alojan en el hotel, que van a pasar el día o que han ido a comer al restaurante, sin ningún tipo de medida higiénica, no se duchan antes de meterse en el agua, ni guardan las correspondientes distancias en la época de pandemia que estamos sufriendo. Niños dando voces a pleno pulmón, jugando con pelotas y colchonetas acuáticas con el beneplácito de sus padres y del personal del hotel, que brilla por su ausencia en la piscina. En cuanto a la terraza del hotel, no sé el criterio que tienen a la hora de sentarse a comer o simplemente de tomar algo. Quisimos reservar una mesa una noche para cenar y nos dijeron que no hacían reservas, cuando la noche anterior sí que lo hacían. Vamos, que por ser cliente del hotel, pocos privilegios tienes. Tampoco se guarda la debida distancia entre mesa y mesa sobre todo los fines de semana que es cuando más gente hay. La limpieza de las habitaciones es correcta, aunque se ven que de personal andan un tanto escasos. En cuanto a la figura de Lorca, reclamo principal del hotel, poco favor le hacen. Estando allí se cumplió el 85 aniversario de su asesinato y no hubo ningún acto, por sencillo que fuera que le recordara. Les vendría bien una reforma de puertas y cierres y poner aire acondicionado en las habitaciones subiendo el precio de la estancia. Espero que mejoren y tengan la mayor de las suertes.…