Este es el Nueva York icónico que tantos viajeros imaginan antes de llegar a la ciudad: rascacielos espectaculares, como el edificio Chrysler o el Empire State, edificios públicos emblemáticos, como la Gran Estación Central o la Biblioteca Pública de Nueva York, y el constante ajetreo y bullicio de las calles. La Quinta Avenida es un paraíso de las compras donde encontrarás cualquier tipo de tienda imaginable, con marcas de moda desde las más asequibles hasta las más lujosas. Visita el centro Rockefeller para contemplar la imponente magnificencia del “art déco”. Si te gusta la gastronomía, disfrutarás en los animados restaurantes de Koreatown, que permanecen abiertos hasta tarde. Por la noche, el barrio de Midtown se vuelve algo más tranquilo, pero a cualquier hora podrás experimentar en él la esencia de Nueva York.

Bienvenido a Times Square/distrito de los teatros, con sus deslumbrantes luces y sus bulliciosas calles, donde todo es más grande, más reluciente y más llamativo. A todas las horas del día y de la noche, este célebre barrio vibra con ilimitada energía como ningún otro lugar del mundo mientras recibe a los millones de visitantes que disfrutan de algún espectáculo en Broadway, compran sin medida o contemplan la famosa caída de la bola el día de fin de año. El distrito que rodea Times Square alberga muchos teatros históricos, con carteleras donde se combinan clásicos como El rey león o El fantasma de la ópera con muchas nuevas y populares producciones. Solo hace falta pasar cinco minutos en este barrio para entender por qué se ha bautizado a Times Square como “la encrucijada del mundo”.