Nuestra experiencia en Parole fue maravillosa. El ambiente cálido y acogedor, nos cautivó desde que llegamos. Nos atendió Dolly, con una simpatía, entusiasmo y dedicación inspiradoras. No tuvimos que leer la carta, su presentación de los distintos platos fue excepcional y la cocina no defraudó....Desde la presentación, el cuidado al detalle, hasta, por supuesto el sabor de los platos y la compañía. Pasta, panes, burrata y bebidas sencillamente exquisitos. Disfrutamos muchísimo la velada, lo recomiendo encarecidamente.Más