Mi estancia fue agradable; pasan por ti a la estación, las camas son muy cómodas y no tuve problemas con el agua caliente. Algo que me preocupaba era la calefacción por la temporada de invierno pero esta super bien que la calefacción esta siempre en 22 y puedes subir o bajar. El desayuno es rico y lo mejor son las tortillas hechas a mano, una delicia. No tuve suerte con los tours, tome el combo (alrededores de Creel) y te traían muy rápido para todos lados. El hotel queda a unos 10 minutos del centro caminando o puedes pedir que te lleven y te recojan incluido en el precio de tu habitación.