Nos hospedamos dos días en Temazcal y es un hotel muy tranquilo, así que el descanso esta garantizado (la habitación 4 fue una muy buena opción). Fueron muy amables al ir por nosotros a la estación del tren y tienen las disponibilidad de al salir de nueva cuenta te llevan a la central de autobuses.
El primer día que llegamos había nevado por la mañana por lo que nos brindaron un calentador eléctrico por si nuestra habitación se sentía fría, ese detalle de la anfitriona fue de lujo (aunque con la calefacción no fue necesario).
Es un hotel que queda un tanto fuera del centro de Creel, por lo que tienes que caminar unos 15 minutos, para los amantes de las caminatas les agradara dar un paseo. En general es muy cómodo, limpio y agradable el lugar. Gracias a Franco y su familia por la atención