La ubicación del hotel es excelente, estas a unos minutos del centro y la catedral lo cual te permite que puedas visitar a pie los lugares de interés del centro de la ciudad.
El desayuno es bueno y tienen una terraza con una gran vista a la ciudad.
Me parece que deberían preocuparse un poco por la capacitación en servicio al cliente del personal (recepcionista) ya que la forma en que me hizo saber que no me ayudaría con la solicitud que tenía no fue la mejor.
La tina de baño es muy incomoda y peligrosa para entrar o salir de ella
El minibar estaba desconectado al llegar y nada accesible para conectarse