El hotel un 10, es verdaderamente increíble, la habitación súper cómoda, impecable, el lobby del hotel inmenso y lo mejor fue sin dudas la atención de todos los chicos que trabajan en Bahia Príncipe, súper buena onda, muy simpáticos. Las comidas de los restaurante son bastante variadas, sobretodo las pastas, una delicia. En el restaurante “Las Olas” que está ubicado a la salida al mar, conocimos a Stella y fue muy amable, súper simpática, quien vaya va a ser bien atendida por todos los que están ahí, especialmente por ella que es muy buena onda. La distancia desde el aeropuerto Punta Cana son aprox 1 1/4hs, lo que recomiendo que reserven transfer desde argentina, porque al llegar al aeropuerto te bombardean los taxistas y te cobran una cosa en el aeropuerto, que es donde pagas, y otra al momento de dejarte en el hotel. Por último lo negativo, es el color del mar, que según dicen, se encuentra la salida de un río que al mezclarse con el mar, se hace un color más oscuro y no claro cómo uno espera ver en el caribe. El agua es fría no es templada, eso no se si es porque me habrá tocado un frente frío o es así todo el año