Se trata de un pequeño hotel (de estilo rural) en el pueble de Oberdachstetten. En el edificio principal solamente se encuentra el restaurantes/recepción, donde te dan el desayuno, o si quieres cenar o comer.
Las habitaciones se reparten en dos edificios que se encuentran en la parte trasera. Uno es de reciente construcción, y está casi recien estrenado. Cuenta con apartamentos de un tamaño considerable, compuestos por salon/cocina con habitación y baño. La parte más antigua tiene habitaciones tradicionales.
La calefaccion funciona bien. La limpieza es correcta cuando llegas, aunque si te vas a alojar varios dias, no ponen mucho esmero en la limpieza diaria, sobre todo en el baño. No reponen los geles, y las toallas no siempre las recogen para lavar (hay que ponerlas en el suelo de la ducha para que se las lleven).
Eso si, si se lo comentas a la dueña, al día siguiente tienes todo listo.
Quitando el tema de la reposición de geles y las toallas de baño, el resto está muy bien.
El desayuno es un poco justito. Variedad de quesos y algo de embutido. Deberían de tener algun tipo de comida caliente, ya que solo hay huevos cocidos
Es un sitio de lo mas tranquilo. En una localización muy buena para hacer turismo por la zona de Rotherburg y Nuremberg.
El precio es muy bueno, con una relación de calidad aceptable