En la ducha, los colores estaban al revés (rojo donde era frío y azul donde era caliente), el grifo del lavabo se descolocaba cuando lo ponías frío, y los canales de la tele estaban en orden alfabético, entonces tenías que bajar 50-60 canales para encontrar Tele5 y ver el fútbol. Por el resto muy bien, las habitaciones genial y el desayuno muy rico.