Si, Casitas Azul Plata superó lo que yo me imaginaba. Situada en una colina rodeada del inmenso mar de Playas Bejuco y San Miguel, con árboles y plantas llenas de flores, que atraen colibris y mariposas, escuchando el eco de los monos congos. Sentada en el atardecer en una terraza que da hacia el oeste, disfruté atardeceres increíbles, oliendo el delicioso aroma de las flores del árbol Ilan-ilan. La piscina con área para los grandes y otra para mi nieta, fue escenario de juegos y relajamiento, siempre con agua cristalina,..cambiaban el agua todos los días. El servicio cálido y eficiente. Las áreas de la casita espaciosas y llenas de detalles de buen gusto, los abanicos y el aire acondicionado funcionaron muy bien, y encontramos todo lo que necesitamos en la cocina, también nos deleitamos con una sabrosa cena que preparamos en el área de barbacoa. Pudimos ver lindas películas por TV, y leer en un ambiente de tranquilidad. El precio es muy cómodo y esperamos que lo sigan manteniendo y así poder visitarlos de nuevo...lo único que sugerimos es que coloquen rótulo de dirección en Pueblo Nuevo, porque hay muchos cruces de camino y los que no conocen se pueden perder. Otro punto muy importante es la seguridad del hotel, fui con mis hijas y nieta y pude estar tranquila en este sentido.
Mil gracias Brigitte y Helmut por todas sus atenciones.