El hotel es de buen gusto y agradable pero yo que me dedico a la decoración me doy cuenta que aún tiene mucha suciedad originada por la obra este es detalle fino que echan a perde la estadía de los que conocemos, un chico Alejandro de la recepción muy despota al atendernos personas como el no deberían de tener contacto con el público, desayuno pobre entiendo que es el Concepto pero le hace falta algo más, la ubicación pésima de no ser por la plaza estarían En medio de la nada.