Cuando llegas al lugar te impresiona, piensas que va a ser toda una experiencia de lujo, pero en realidad la expectativa fue muy alta. La habitación tenía una fuga en el aire acondicionado y se inundó el clóset y la entrada por la noche; una parte de la habitación olía a vómito ¡!; no tienen TV; les falta mantenimiento a la alberca y jacuzzi: el fondo de la alberca se veía sucio, no se antojaba meterse; el agua del jacuzzi, turbia; la comida del restaurante súper equis tirándole a mala… el precio no lo vale. Se fue la luz por horas y ni una triste vela te ofrecen…