Nuestra estadía en el TRS de Cap Cana fue una agradable sorpresa. Fuimos porque unos amigos iban, y ni siquiera investigamos. Desde el primer día fuimos recibidos con gran entusiasmo, bajo estrictas medidas de seguridad por el Covid. Nos impresionó mucho como tanto las medidas de distanciamiento como las limitaciones en número de personas, se cumplieron. Este hotel tiene hermosas instalaciones, fina decoración, exquisita gastronomía en todos los restaurantes (Helios, Capricho, Gaucho e Izakaya) y en adición el servicio a la habitación estuvo delicioso. Las suites estaban equipadas con todo los elementos de un gran hotel de lujo.
Lo que más disfrutamos de nuestra estadía fueron las atenciones de Nicauris Polanco (encargada de Mayordomía) Luis Daniel (mayordomo), Xiomara (en el Café) En los restaurantes: Jairo, Manuel, Ramón, Sandy, Lissangie, Sabrina (hostesses), Sandy, Antonio, Juan Luis, Freddy (Parrilla). El señor Charly (actividades) estuvo siempre atento a los detalles e intentando siempre hacer agradable el momento y Joel (botones). Estos fueron a quienes tuvimos de cerca, pero todo el personal en general se mostraron: activos, atentos, dispuestos y muy cordiales en su trato.
El toque especial de la violinista y la saxofonista para los desayunos fue singularmente agradable.Más
- Estacionamiento gratis
- Playa
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