Mis familiares y yo quedamos encantados con el lugar, mi esposa y yo decidimos celebrar nuestra boda en el hotel, el trato fue excelente, la comunicación y participación del hotel fue sobresaliente, sin tener necesariamente la oportunidad de interactuar mucho con el gerente del hotel, siempre atento y amable, agradecemos con sinceridad a todo el personal del hotel, especial saludo al gerente Haldring Romero. El hotel tiene un diseño particular y genuino, personalmente me gusta estar en contacto con la naturaleza y este hotel lo permite demás, la ubicación es inmejorable al ser una bahía que permite un oleaje tranquilo, la playa en total paz y los atardeceres entrañables, hay una parota abrazada por bugambilias y puedes ver fauna como aves y reptiles dentro del hotel. El servicio en los restaurantes es de buen nivel, la gastronomía exquisita (tienen la ventaja oaxaqueña), y las habitaciones confortables con vista al mar. Lo recomiendo ampliamente.