Hotel bueno, con muy buena ubicación en una zona tranquila. El hotel es muy tranquilo y las habitaciones son buenas y cómodas. Lo que no me gustó es que las ventanas daban al pasadizo y no se podía tenerlas abiertas ya sea por la bulla o por la privacidad. Cerca a buenos restaurantes y cafés. Cuidad con los taxistas en esta ciudad, muchas veces cobran lo que les da la gana y engaña a a los viajeros.