Lo extraordinario de la cocina de autor es que solo en su casa puedes comer lo que su genialidad, cuando la tiene, es capaz de crear. Este es, sin duda, uno de los mejores creadores de Veracruz. Comí, por recomendación de clientes n Tripadvisor, los camarones con tuétano. Simplemente, es una combinación extraordinaria: ni los camarones opacan el tenue sabor del tuétano -servido en abundancia- ni el tuétano sale sobrando, pues añade ese toque exquisitamente grasoso que suele faltar a los camarones. Junto con el perejil frito y la salsa verde de habanero, logran unos tacos incomparables. El cócteil molienda (mezcal, jugo de mandarina, vaso escarchado con sal y chile) estupendo. La tarta de plátano, suprema. El café express, digno de un bar italiano. Pero, sobre todo, la excelencia del servicio, tanto del mesero (que parece ser el dueño, pero no me atreví a preguntar) como del joven ayudante, más tímido y quizás un poco inseguro, fue, de todos modos, extremadamente amable. No es completa una visita a Veracruz sin, al menos, una comida en este extraordinario restaurante.