Mi esposa y yo decidimos visitar Costa Esmeralda en Semana Santa, clásico no hicimos reservación y acabamos hospedados en este hotel. La relación costo beneficio es muy mala, el hotel tiene anexos alejados de la construcción principal con habitaciones en malas condiciones, puertas, ventanas, piso y muebles, en especial la cama, si buscan descansar, en esas camas no se puede. Las albercas no son cuidadas y puedes lastimarte con el piso. El restaurante esta regular, no esperen disfrutar platillos ricos de la región, solo encontrarán comida a secas. No había toallas, la ropa de cama tenía hoyos, el clima no servía, en fin. No es el hotel que buscan si lo que quieren es atención, seguridad y calidad en recompensa por su dinero.