El hotel no está en las mejores condiciones, es viejo, el clima se está cayendo a pedazos, no enfría la habitación y en la noche es imposible dormir con tanto ruido que hace. Se anuncian como pet friendly y cuando llegue con mis 2 perros pequeños anunciados desde la reserva, después de pagar a mi llegada un empleado del lobby me pidio evitara sacar a mis mascotas o esconderlas porque los huespedes se molestan. Cabe mencionar que son perros entrenados que están acostumbrados a viajar conmigo, no hacíamos ruido y sus necesidades fuera del hotel. Que cambien sus condiciones con las que se anuncian! Porque esa fue la razón por la que lo elegí para hospedarme con ellos. Para el costo que pagué, pude haberme hospedado en otro lugar que en realidad sea pet friendly, no vuelvo.

Tenia años que no visitaba este bonito estado debido a la ola de violencia que ha azotado diversas zonas del estado, y con mucho gusto me di cuenta, que la verdad no ha cambiado demasiado, el malecón se encuentra bien cuidado, la comida sigue siendo riquísima, en especial la comida de la parroquia, pero con mucha pena me di cuenta que la gente veracruzana tiene fama de ser gente amable y cálida, y la verdad es que no es así, al menos no en está ocasión, el personal del hotel, a excepción de algunos botones y personal de limpieza, son muy groseros, se la viven platicando en la recepción en lugar de darte un trato adecuado. los meseros (de la mayoria de los restaurantes) no se quedan atrás. Les recomiendo no salir de noche, se dan muchas balaceras y suelen asaltar a los turistas. La alberca si bien tiene una vista espectacular, es súper pequeña y no muy práctica, la señal de wifi únicamente llega bien en los pasillos, en las habitaciones la señal no es buena.

Buena opción para hospedarse por cuestiones laborales, no así en familia, a mi gusto. Muy céntrico, llegas pronto al Puerto. No tiene estacionamiento ahí mismo y no te dejan estacionar afuera aunque haya lugar, no sé porqué!!
Ahí me quedo cuando viajo a Veracruz5 x trabajo