Pésimo servicio, en la entrada nadie te recibe ni te da mesa, te apresuran para tomar la orden, llevan la comida platillo por platillo, éramos tres pax y solo llevaron dos platillos porque uno se les olvidó, no recogían los muertos de la mesa, el mesero se desapareció y éramos varias mesas esperando a que alguien nos atendiera, hasta para solicitar la cuenta se tardaron muchísimo!!! Tuve que pararme a hablar a una persona (que al parecer era como el capitán de meseros) para indicarle que teníamos un buen tiempo esperando la cuenta, a los minutos llegó el mesero molesto a entregarnos dicha cuenta... No se si no hay suficienten meseros o no están capacitados y es una lástima, porque la comida a pesar de lo ser lo mejor que he comido, no es mala... Pero lamentablemente el servicio tiene muchísimo peso. Lo único rescatable en cuanto al servicio, es el chico que preparaba los "lecheros" (de cabello cortito) y los baños estaban super limpios.