Después de un vuelo retrasado un par de horas por fin llegamos a Mérida y la parada obligada era Oliva que es nuestro lugar favorito, ya que sus platillos son auténticamente italianos… comenzando con la ensalada Campognola y una Bruschetta de hongos, como platos fuertes los ravioles y el Parppadelle con Ragú de Res suculentos 👌🏻; la atención y recomendaciones de Wilberth sin duda fue la cereza del pastel. Muchas gracias por una cena tan agradable!!
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