Soy cliente, me hospedo con ustedes cada año o cuando hay eventos como noche mexicana o día de muertos.
Hoy acudí a desayunar con mi familia al brunch, llegué al valet y me preguntaron que a dónde iba, les dije que a desayunar. Dejé mi auto y fui a comprar agua natural a su boutique, pagué $500 por 5 aguas naturales, me dijeron que el brunch había terminado y el restaurante estaba por cerrar. Decidí salir del hotel y regresar a comer en lo que abrían de nuevo el restaurante. El encargado del valet parking Juan Carlos me dijo que de ninguna manera que si ponía un pie fuera me tenia que ir con mi auto.
Inconforme con la respuesta me comuniqué vía telefónica con Antonio Patiño y me dijo que sí me salía del hotel me harían un cargo por $1,000 pesos, lo que es contrario a sus políticas visibles en la entrada que señala:
"AL SALIR DE LA PROPIEDAD SIN RETIRAR EL VEHÍCULO, LAS 2 HORAS DE CORTESÍA SERÁN CANCELADAS COBRANDO LA TÁRIFA NORMAL DESDE SU LLEGADA"
Política que les dije más de 10 veces, CÓBRENME LA TARIFA NORMAL, pero se negaron argumentando que tenía que desalojar inmediatamente el hotel con mi auto, impidiendome consumir alimentos en el hotel.

El servicio es condicionado a criterios absurdos de "gerentes" de salarios de 2 pesos. Discriminan al mexicano, no fuera extranjeros porque hasta de tapete se les ponen.

El cliente soy yo y mi preferencia y dinero no van a ser condicionados a criterios absurdos y personal inepto.

Su precio es excesivo para el pésimo "servicio" que dan.

bonito hotel, buena comida y buena actitud del personal, el problema es que les importa más hacer eventos para rentar los espacios abiertos sin importar el ruido que genera para sus huéspedes, además de los cohetes pirotécnicos que están casi 24/7 que no dejan descansar, se les olvida que primero son un hotel y segundo es ser centro de eventos y convenciones.

Hace unos años, solíamos ir al Rosewood. Conocemos todos los restaurantes de ese lugar: el Luna Rooftop el restaurante 1800, el bar del lobby, el bar de la alberca. Además, nos hemos alojado algunas veces y fuimos socios del SPA por 7 años. Cuando Rosewood abrió en 2011, el servicio era espectacular, la comida exquisita y los gerentes chefs y gerentes de. bares eran de lo mejor. De 2 años a hoy en día ha dado un bajón impresionante. Fui editora de varias revistas y ahora tengo la mía propia, y hago podcasts de turismo y en varias ocasiones los he mencionado en algunos de mis artículos y programas de radio. Ya no lo haré más. Mi queja principal es acerca del trato de las hostess y vigilancia; ya que son de lo más altaneros, ignorantes y clasistas. Ya muy raramente vamos al bar Luna ( Que antes amábamos ir por la calidad y servicio) pero ya nunca más iremos. No tienen idea de lo que es el servicio el cliente. Lo bueno es que ya tienen cada vez más competencia. Preferimos ir a otros lugares como los son Atrio, El nuevo Bar del Belmond Casa Sierra Nevada que es espectacular, el Koisin, con la mejor vista de S Miguel, el Hotel Aqua, etc. Lamentablemente el Rosewood no es lo que solía ser y ya no lo recomendaré.