Limpio, desinfectado, camas limpias, personal con actitud de servicio todos, la comida es como en cualquier otro lugar que esté bien, aceptable, en general la relación calidad precio es muy buena, y a mi no me molesta la música en las noches de un local de junto, no está toda la noche no sé a qué hora termina porque me quedé dormido las 3 noches que estuve. Es muy céntrico , a una calle del jardín e iglesia principal, en la esquina hay un Starbucks, … busque un hotel que fuera de los menos caros (todos son muy caros ahí pues hay demasiados gringos y suben todas las cotizaciones con su presencia en dólares), sí volvería a regresar a este hotel, la entrada es muy bonita con su piso de rombos negros y blancos y sus arcos y columnas coloniales además de mucha ambientación de plantas y bonitas lámparas me parece muy agradable y elegante , como ya dije las habitaciones muy limpias cada día y comida no mala, normal conforme al precio también regular, sábados y domingos hay música viva, alrededor mucha tienda de arte y artículos y ropa tradicionales mexicanos, me gustó, por el precio no le faltó nada, regresaré, escribí esto con lo primero que se me vino en la mente y sentimientos pues a donde voy escribo aquí mi diario, para saber a donde puedo regresar y de las impresiones que me llevo de cada lugar.