Precioso hotel boutique, la habitación excelente, la terraza del 3er piso preciosa, la vegetación impecable, se sintió una tranquilidad y paz estar ahi.
La atención de los que trabajan ahi buenísima.
Usualmente nos quedamos en hoteles grandes, en esta ocasión sentimos la diferencia de atencion personalizada como una experiencia increíble. Definitivamente volveremos a visitarlo.
Agradecemos su opinión y comentarios que son muy valiosos e importantes para mejorar nuestro servicio.
Esperamos verlos pronto de regreso.
Hermoso lugar, excelente atencion y servicio
Ubicacion muy buena y lugar agradable para estar en paraje, muy comodo y limpio, instalaciones excelentes, el servicio de las personas que laboran alli de lo mejor, grata visita en San Miguel de Allende.
es un placer recibir su opinión y comentarios que son muy importantes y valiosos para mejorar día a día nuestro servicio.esperamos recibirlos de regreso pronto.
Un hotel boutique mágico, el lugar: espectacular; cada habitación es decorada de manera única y te ofrece una experiencia diferente.
Las camas, las sabanas y las almohadas, son de top calidad, y te permite descansar de lo más rico.
Desayunamos todos los días allí, tienen una granola deliciosa, Adriana te cocina en el momento lo que te hace sentir en casa.
Tienen una terraza divina, en la que puedes hacer ejercicio por la mañana, tomar un té, ver el atardecer, y tomar un vinito…la súper vista de las iglesias de San Miguel.
Tomas, es la persona que te asiste, acompaña y se esfuerza por hacerte tu estadía agradable, todos siempre te consienten (Porque esa es la palabra) y te ayudan en lo que necesites con una sonrisa.
Jorge, el manager, un profesional atento que motiva a su equipo.
Este es sin duda el mejor es LA OPCIÓN para disfrutar de San Miguel de Allende, en un hotel boutique de lujo en todas las experiencias.
Homero fue muy amable y servicial. Desde nuestra llegada, nos ayudó a estacionar el auto. Si se cobra 250 por día de estacionamiento y aunque no me convence mucho eso, me pareció excelente el hotel, lleno de naturaleza y decorados hermosos. Muy tranquilo y el cuarto súper confortable, hay una cafetera con cápsulas y azúcar, así como sustituto.
El desayuno es continental y dan café, pan y fruta.
La terraza está muy linda aunque debería ser mejor aprovechada. Tiene una vista bella para fotitos y ver el atardecer. En general, está muy lindo el hotel y sí regresaría
La ubicación si está algo escondida, y el caminar al centro son como 15 min, pero en camino empedrado y empinado. Estoy embarazada y sí me costó trabajo pero se logró.
No es apropiado para personas con discapacidad, ya que no cuenta con elevador ni rampas.
Hay netflix en la habitación.
Un pequeño hotel boutique, precioso. Se siente sumamente acogedor. Dos cosas que hay que saber, esta en en una colina, entonces bajar caminando al centro de San Miguel es muy sencillo, pero subir caminando, no es tan sencillo, lo mejor sera tomar un taxi, que cobrara entre 60 y 80 pesos mexicanos. El desayuno incluido, es algo muy sencillo, unas frutas con granola y yogurt, jugo o cafe y listo, si quieres huevos, tiene un costo adicional.
