Siempre que puedo visito este hotel, el restaurante ofrece excelente platillos, pues una de las propuestas del dueño, es preservar la gastronomía local, así que los chiles en nogada son deliciosos. Las habitaciones están decoradas con excelente gusto, el arte y las antigüedades son dos elementos fundamentales en este lugar que por tradición los dueños tienen el oficio de mercaderes de artes y antigüedades desde mucho antes que abriera el hotel.
Son un tesoro en pleno Callejón de los Sapos. la cercanía con el ambiente de esta zona llena de restaurantes, tiendas y museos, hacen de este hotel una gran recomendación que seguro encantará a cualquiera. Este Hotel con una arquitectura maravillosa que tiene atisbos de otras épocas, es muy fotogénico.
Sin duda, es un hotel boutique en donde las habitaciones tienen su propia personalidad y el dueño del lugar siempre está cerca para darle la bienvenida a aquellos que visitan este interesante espacio. Lo recomiendo ampliamente.
Elige cualquiera habitación que tenga ventanal al patio, cuando nos hospedamos un grupo musical tocando en pleno patio amenizando el restaurante de noche, nos inspiró a pedir una botella de vino y vivir una de las noches románticas más emblemáticas a mi esposa y a mi.