Terrible experiencia, nos dejaron parados en el portón con todas las valijas, habían tenido un problema eléctrico , dos días antes. No hubo ningún tipo de intento de ayudarnos a conseguir otro hotel o transporte. Cero en atención al cliente si pueden busquen otra alternativa. Es increíble 2 de la tarde con un bebé de 4 meses , y ningún intento de ayudar, 1hora y media en el portón ni un vaso de agua. La playa no está enfrente, si no a 100 metros. No tienen ninguna infraestructura propia en la playa, ni camastros ni toallas, ni palapas, si vas prepara 600 pesos al día por persona para ir a un club de playa y que te puedas ir a la playa. Los que tuvimos que utilizar técnicas yoga de hidraya, en este hotel para calmarnos fuimos toda mi familia. Sidney Hagen

hotel súper cuidado las instalaciones de lo mejor.... una tranquilidad y armonía que se vive en el hotel alejado de cualquier tipo de molestia ... la bienvenida de los dueños súper agradable siempre pendientes de todo lo que ocupavamos, desayuno de lo mejor jugo ,pan y fruta no se necesita más para comenzar el día...se encuentra a unos 50 metros del mar una vista súper increíble desde la terraza .... sin duda alguna regresaremos..