Todo es excelente comida, sabor extraordinario, servicio, limpieza, calidad-precio, lo único que ya no me gusta es que siempre tengan música, que no a todos nos gusta y a un volumen elevado que impide comer y convivir tranquilos. Es una lástima que crean que a todo mundo le gusta comer con música ruido.
Mi calificación sería de 10 si el restaurante no estuviera lleno de pantallas con ruido a fuerza.
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