Nos hospedamos el fin de semana, es un hotel muy bonito y muy limpio, las habitaciones son muy cómodas y de buen tamaño, en el restaurante puedes comer muy rico, la alberca tiene agua tibia, el personal es muy amable, necesitas carro o taxi para ir al centro son pocos minutos de camino, es un hotel familiar y es un lugar muy tranquilo, tiene canchas de tenis.