El restaurante es un auténtico italiano dentro de Wales. Y no podría ser de otra forma, pues su gerente es de Italia.
Estuvimos una noche en la que tuvieron la diligencia de aceptarnos pasadas las 10PM, cuando teóricamente su cocina ya estaba cerrada.
La calidad de la comida es realmente alta, los platos son elaborados, realmente italianos.
El servicio es su otro punto fuerte, rápido, servicial, amable, siempre atentos pero sin agobiar.
Por la tipología de local y de clientela, no se trata de un restaurante donde ir en pantalón corto a comer una pizza, sino que es perfectamente el lugar idóneo para ir a celebrar algo... o simplemente a cenar bien en un ambiente algo más selecto.
Para repetir.