Hemos estado alojados 5 días. Nos hemos sentido como en casa gracias a las extraordinarias personas que trabaja en este hotel. Estuvimos alojados en una habitación dúplex, para 3/4 personas. Las habitaciones son cómodas y con camas confortables para el descanso. El hotel es acogedor sin grandes lujos. Está ubicado a pie de pistas (puedes salir esquiando del hotel). Está a 200 m del centro deportivo donde te puedes ir a dar un baño relajante después de esquiar (con el forfait tienes dos días gratuitos). Estás a 5 m. Del centro del pueblo y al lado de bares y restaurantes. En el precio teníamos incluida media pensión. Las cenas, son elaboradas y sabrosas. Para los que quieran cenas copiosas, deberían descartar esta opción. Para que fuese perfecto, como sugerencia, al desayuno le faltaba la opción de huevos revueltos y bacon y una oferta más amplia de cervezas (sólo tienen una opción).