Es un hotel nuevo con un diseño muy agradable.
La habitación se nos hizo un poco pequeña ya que estuvimos siete noches
Aunque tenía una pequeñita terraza faltaba intimidad, pues la separación entre ésta y la de al lado es un tabique de una altura de unos 70 cm, o sea que estabas con los vecinos.
La cama grande y muy cómoda
Buena limpieza diaria y el desayuno bastante bien.
El personal de recepción un poco seco.
Cuando llegas no notas un recibimiento cálido como es lo normal en los hoteles, no te dan información de la ciudad, no te preguntan si la conoces...
Eso me pareció bastante extraño.
Por lo demás todo bien , es un hotel en el que se puede descansar placidamente, ya que no se escucha ningún ruido
La piscina pequeñita pero estupenda y muy cuidada.