Viendo las reseñas (casi todas negativas) veníamos con algo de "susto".
Todo cambió cuando llegamos,
La habitación es amplia y limpia,cierto que una mampara o cortina para la ducha vendría genial,y algún enchufe más,pero nada de otro mundo.(nos tocó la 610) unas vistas espectaculares.
La comida,variedad y todo buenísimo para ser un 3*. (he estado en otros hoteles de más * y todos los días lo mismo en diferentes sitios,y menos calidad)
La paella y fideuá,esperaba que estuviera pegada,pues para nada ¡¡¡BUENÍSIMA!!!,el ajo blanco 🤤,gran variedad y con temáticas de diferentes países cada día.
El personal muy bien también,y si tenéis la suerte de coincidir con José Reyes,mejor aún,chapó por él y su atención a los clientes.
La animación de 10 tanto para niñ@s como para adultos,todos los días había algo diferente,( se agradece mucho eso,teniendo niñ@s).
Las instalaciones están muy bien también para ser un 3*
(Algunas reseñas que he visto,sale que está la pared "desconchada"q si tal q si cuál.... seguro que quién lo pone por su casa lleva sin ir un pintor años)
Nosotros hemos venido en calidad de todo incluido y esta genial.
La única contra que le veo son las medidas de la piscina,donde pone 1'35 casi me cubria a mi,y mido 1'70.
Es algo que seguro solucionarán pronto (nivelandola)
En definitiva nos ha encantado,(un 9 de 10)ojalá podamos volver a venir más veces.
Un saludo.
Alberto