El hotel Sol Melia Don Marco es muy malo, en casi todos los sentidos. Cuando se contrata el cliente desconoce cosas importantes como que no tiene servicio de restauración. Es parte de un complejo turístico con dos hoteles más, con lo que lo que parece una ventaja es una constante desventaja. Si quisiste contratar un hotel tranquilo al lado de la playa te has equivocado en tu elección, o mejor te han dado una información sesgada a la hora de contratar. Además del precio que no es barato, te encontrarás con un hotel pequeño con grandiosos fallos. El check in ya fue un absoluto desastre, la habilidad de la recepción fue lamentable, el trato pésimo sin "copa de bienvenida " , dificultad para realizar el pago con la tarjeta de la reserva .. y hasta entrega de la factura con los datos incorrectos. La habitación asignada con un mobiliario del siglo pasado, desde luego impropio de un cuatro estrellas, ni siquiera hay una butaca en la que poder sentarse para quitarte los zapatos y un escritorio enorme que ya me contarán que utilidad tiene en un hotel de vacaciones. Si bien el tamaño de la habitación es amplio, una de las opciones por la que lo contraté. Pero la primera impresión es mala pero puede ser peor, el servicio con unas toallas viejas con unos rotos que en una era un agujero en el que cabía una pelota de tenis. A partir de ese momento es difícil quitarse la impresión de que estas en un hotel al que se le caen las estrellas. Para el desayuno te tienes que trasladar a alguno de los otros dos hoteles, en mi caso al tener una alergia alimentaria a la lactosa, intentar realizar un desayuno se convierte en un problema. E intentar solucionarlo pues casi que peor, desde recibir una mala contestación del personal de la sala hasta recibir una información de la Señora Guerra, responsable del hotel, que me indica que vaya al hotel más grande en donde hay una sección de "alergias" claro que desconoce que es para alergia al gluten y que solo hay una bolsa como de magdalenas.
Lo mejor la atención de la encargada de la limpieza de la habitación, amable y comprometida con su trabajo.
La incomodidad tiene difícil solución en un hotel de estás características.. el ruido en general es bastante alto durante el día en todo el hotel por las actividades propias de establecimientos. Y a la hora de realizar una reclamación chocas con la propia gestión del hotel, para recibirla tendrás que esperar a que llegue un responsable del hotel, que te atenderá amablemente, pero solucionar poco, " tomará nota"
No lo recomiendo sobre todo en relación calidad precio, e incomodidad si tu elección es un hotel tranquilo. Como nuestra estancia se ha ampliado en otro hotel de la misma ciudad, hay oferta hotelera en Torremolinos de mejor calidad y a precios más económicos.