Llegamos a la habitación y encontramos que no había leche, no había papelera en la habitación y la única que había, en el baño, estaba llena de papeles del cliente anterior. Llamamos a recepción y vinieron y la cambiaron y trajeron la leche. A partir de ahí nunca más cogieron el teléfono. Y digo nunca más porque tuve que bajar dos veces ya que la calefacción no funcionaba (me dijeron que el sol era para el aire frío y el símbolo del frío para el aire caliente; todo al contrario. Ver foto).
Después de insistirles vinieron y comprobaron que era así tanto en mi habitación como en el resto así que no pudimos cambiarnos. Cierto es que había una manta pero no creo que estuviera limpia del mismo día ya que aún seguían con el aire acondicionado en funcionamiento.
El tiempo en San Sebastian era de vientos con rachas de 90km/h, lluvia, mucha lluvia y mínimas de 10 grados. Ideal para un poquito de aire acondicionado al llegar a la habitación.
El personal de recepción me pidió perdón porque la calefacción no iba a funcionar hasta que viniera el personal de mantenimiento y "ni hoy ni mañana va a venir". Genial, qué gran servicio para un hotel de 4 estrellas. Les pedí un edredón ya que solo teníamos una sábana y lo trajeron. En mi primera noche ya quería irme de este hotel. Una auténtica pena.
Ahora sé lo que vendrá, el manager del hotel escribirá: "le agradezco su tiempo al escribir estas líneas y lamento que su experiencia no haya sido de lo más satisfactoria..." etc etc... bla, bla,bla... LAMENTABLE. No hay excusas a la hora de no ser serios ni profesionales, a la hora de no respetar al usuario, no acondicionar la caldera a tiempo cuando toda España sabe que se espera una Dana y a la hora de no compensarnos de alguna manera. Eso sí, el precio de la habitación incluyó todo: papelera, un mando de tv en condiciones (ver foto), calefacción... NADA PROFESIONAL.