Tengo que decir que nuestra estancia en este hotel ha sido una experiencia bastante decepcionante. El hotel, por sus características, debería ser un lugar estupendo para alojarse, sin embargo, el problema del calor en las habitaciones de la tercera planta ha arruinado por completo nuestra experiencia.
La temperatura en nuestra habitación (313) era insoportablemente alta, y a pesar de que traté de abrir la ventana para que circulara un poco de aire, no hubo manera de aliviar el calor. El personal del hotel nos informó de que el aire acondicionado aún no estaba activado en todo el edificio, por lo que no podían hacer nada para solucionar el problema.
Desafortunadamente, el calor en la habitación hizo que fuera prácticamente imposible descansar adecuadamente. Nuestro tiempo en la habitación fue incómodo, sudando y sin poder descansar.
También me gustaría señalar que otra cosa que no nos gustó de nuestra estancia en este hotel fue la insistencia del personal en que tomáramos taxis para desplazarnos por la ciudad. El primer día les hicimos caso y gastamos un total de 33,87€ en tres taxis para llegar a diferentes lugares de la ciudad. Sin embargo, en los siguientes días, decidimos ir en coche y descubrimos que había parkings públicos muy cerca del centro histórico donde podíamos estacionar nuestro coche por un precio mucho más razonable. En total gastamos solo 13,4€ en dos días en esos parkings, lo cual nos resultó mucho más económico que tomar un taxi.
En resumen, aunque el hotel tiene algunas características para ser una opción excelente, la falta de aire acondicionado y el calor insoportable en las habitaciones de la tercera planta hicieron que nuestra experiencia fuera bastante nefasta y no recomendaría este hotel a otros viajeros. Espero que el hotel solucione este problema pronto para que otros huéspedes no tengan que pasar por lo mismo.